martes, 19 de febrero de 2013

¿Y si no queremos ir de rosa ni comer perdices?

Uno de los vídeos que han causado furor en los últimos meses es el de esta niña, Riley, y su discurso contra las empresas y cómo éstas  engañan a los niños para que ya desde pequeños tengan claro que el rosa es para ellas y no para ellos:



Habla con tanta soltura y convicción que a mi por lo menos me parece un discurso puesto en su boca por un adulto.  Riley está harta de los juguetes de color rosa ( a los que llama "pink stuff") y de princesas. Se siente engañada y se expresa acalorada ante un tema que le toca realmente la fibra sensible, los juguetes.


Es cierto que las grandes campañas de marketing que utilizan las empresas  de juguetes, marcan fuertes estereotipos para niños y niñas a través de códigos de colores (rosa para niñas y otros colores no-rosa para niños) que, a su vez, están asociados a distintos roles (superhéroes para niños versus princesas para niñas) y a futuras ocupaciones profesionales (planchas, maquillajes o cuidado de bebes para niñas versus construcción, automoción o ciencia para niños). Ante estas acusaciones, los jugueteros han argumentado que ellos fabrican los juguetes que demandan los niños y niñas, pero según las asociaciones de padres, los niños y niñas piden unos juguetes u otros bajo el peso de los estereotipos que los propios jugueteros han creado con sus campañas de marketing.

Coches,muñecas,cocinitas, aviones, por ejemplo, son juguetes que gustan a los muy pequeños (hasta los dos o tres años), sean niños como niñas, eso sí, antes de interiorizar el bombardeo cromático y temático de lo que es supuestamente correcto para cada sexo, en forma de publicidad, comentarios y regalos de familiares, o la propia ropa que llevan ellos o los compañeros de clase. Es en estos momentos en el que se va adquiriendo  el "pensamiento único". En definitiva, los estereotipos nos los van creando  la publicidad, la sociedad y ¡la humanidad! .

Me es grato ver  que, a juzgar por el tono  de indignación de la avispada Riley este tema la tiene muy "hartita". Además, Riley no está sola ¿Queréis conocer a  Luca? Otro valiente..

                                                 Proyecto de Coeducación  Vía

Le doy las gracias  a Riley por hacerme reflexionar sobre sus palabras: ¡No son sólo cosas de niños! 

Está claro que los estereotipos sexistas forman parte de nosotros desde pequeños pero el problema no es que tengamos  que elegir entre ser princesa o superhéroe, el problema está en el por qué de esta dicotomía del estereotipo sexual en función de la cual nosotras debemos anhelar ser princesas y ellos superhéroes en todos los sentidos habidos por imaginar. Pues si me dan a elegir yo prefiero ser una superhéroe que no una princesa. Además las princesas que culturalmente nos han inculcado están llenas de esterotipos sexistas, por ello tengo razones para no querer serlo :

Blancanieves??? Rodeada de adictos al trabajo y sin salir de casa...
Cenicienta?? se pasaba todo el día fregando y limpiando...
La bella Durmiente??? Buff, cansina, todo el día durmiendo...

Sinceramente he de deciros que  no me gustan las perdices, ni los zapatitos de cristal, ni las hadas madrinas que no existen...Me gustan las manzanas, levantarme a la hora que quiera, bailar descalza, comer con las manos (en algunos casos, claro :)). Me gusta la acción y la aventura y no me gusta estar calladita ( ¡me cuesta horrores!), ni siempre estupenda.

¿Y si nos están poniendo en un lugar que no nos corresponde ? Creo que realmente no nos gusta ser  eternas princesas ni  ir siempre de rosa , preferimos  disfrutar de toda la paleta de colores  y ser REINAS de nosostras mismas ;))



 

2 comentarios:

  1. ¡¡¡Que buenos los videos!!! me declaro fan de Riley!!!!

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  2. ¡Hola Victoria! Bienvenida al "Bolso de Mary Poppins", todo un placer.

    Sí,son geniales.Todo y lo pequeños que son, cuestionan y hacen sonrojar a los adultos que somos quienes decidimos esas cosas.
    Riley tiene un futuro prometedor;) ¡Me uno al club de fans!

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